Corte de Apelaciones ha rechazado recursos de amparo en favor de extranjeros que ingresaron en forma clandestina.
En la última semana, en el extremo norte, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal y la Corte de Apelaciones de Arica han emitido los fallos más duros en lo que va del año, sobre causas por el delito de tráfico de migrantes y también tras la presentación de recursos judiciales interpuestos por organizaciones que apoyan a migrantes en favor de extranjeros que ingresaron en forma clandestina al país.
El tribunal, en un fallo unánime, condenó a una pena de cinco años de presidio a una mujer, de nacionalidad chilena, que operaba en esa región fronteriza junto a un grupo indeterminado de ciudadanos extranjeros facilitando el ingreso clandestino al país de migrantes que incluían a menores de edad.
En el proceso judicial se acreditó que, por pagos de hasta US$ 395 por persona, que a veces se reiteraban por nuevos cobros realizados en períodos cortos de tiempo, trasladaban a migrantes por vía terrestre por países de la región, como Venezuela, con Chile (y, particularmente, Santiago) como destino final.
En la resolución se indicó como antecedente que los extensos traslados habrían comenzado en mayo de 2019 y que se habrían dificultado posteriormente por las restricciones a los desplazamientos impuestos por la pandemia del covid-19. Estos incluían escalas en ciudades de países vecinos, como Tacna, en Perú, donde los migrantes eran alojados en hostales a la espera del cruce de la frontera.
A lo anterior se sumó durante los últimos días otro fallo unánime de la Corte de Apelaciones de Arica, que rechazó un recurso de amparo interpuesto por organizaciones de ayuda a migrantes en favor de 16 extranjeros, de nacionalidades venezolana y dominicana, que fueron expulsados del país luego de un proceso administrativo en su contra activado por el gobierno regional de Arica.
Los implicados habían ingresado en forma clandestina eludiendo controles migratorios.
«Burreros» y vehículos como bodega
Un particular modus operandi para el ingreso de droga al país fue detectado por patrullas militares y de la PDI que resguardan la frontera norte. Un extranjero procedente de Tacna, en Perú, ingresó a Chile a pie por un paso no habilitado con un cargamento de droga. Una vez en Chile, un vehículo conducido por otro extranjero se acercaba a la frontera para recoger al transportador y la droga, que quedó acopiada en el vehículo en Arica.
Se informó que en el último operativo fueron detenidos dos venezolanos: un ‘burrero’, que trasladó e ingresó con la droga, y otro individuo que se trasladó desde Arica para recoger la droga y al transportador. Ambos quedaron ayer en prisión preventiva.
En otro operativo similar, realizado la semana pasada, fueron detectados tres venezolanos que trasladaban droga en sus mochila
Fuente: El Mercurio