FENÓMENO. La Gobernación del Tamarugal instaló carpas y baños en espacios públicos, ya que la población migrante es cercana al doble de los habitantes del pueblo, y por las noches se registran temperaturas bajo cero.

El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, se reunió ayer en La Moneda con altos mandos de las Fuerzas Armadas y de Orden, para enfrentar la crisis humanitaria desencadenada por el arribo de cerca de 2.000 personas provenientes de Venezuela a Colchane, en la Región de Tarapacá, un pueblo que cuenta poco más de 1.000 habitantes. Los inmigrantes, la mayoría de ellos ilegales, han dormido a la intemperie en busca de entrar a Chile, por lo que el secretario de Estado afirmó que en los próximos días anunciará el Plan Colchane, aunque destacó que «no hemos hablado de refugio».

En momentos en que la nueva ley de migración espera ser revisada por el Tribunal Constitucional (TC), tras su aprobación en el Congreso, junto al requerimiento ingresado por el Frente Amplio (FA), donde se cuestiona que el Gobierno determine quién puede y quién no puede ingresar al país, más de 1.800 venezolanos se apostaban ayer en las calles de Colchane.

Por esto, cerca del mediodía el titular de Interior se reunió con los altos mandos de las FF.AA. para, luego de alrededor de dos horas, afirmar que «estamos preparando el Plan Colchane, que involucra otras definiciones más que anunciaré en los próximos días, pero tiene que ver con un apoyo al municipio en recursos para que puedan mitigar a su comunidad. Nos conectamos con ese sufrimiento. ¿A quién le puede gustar que una persona entre y rompa la puerta?».

Estas palabras aluden a la denuncia de una vecina de 70 años sobre el supuesto robo de enseres en tres casas, perpetrado, según ella, por los inmigrantes, indicó SoyIquique.

Refugio

Delgado señaló también que «no hemos hablado de (dar) refugio en Colchane, hemos estado en contacto con el alcalde y el nuevo gobernador ha estado allá. Necesitamos que el municipio se comprometa con este plan (que anunciará en los próximos días) y no me cabe duda de que va a ser así».

La Gobernación del Tamarugal, por su parte, instaló carpas en espacios públicos para que los viajeros puedan pernoctar, sobre todo los más de 200 niños y embarazadas que estos días han dormido a la intemperie con temperaturas bajo cero, a causa del desierto, y ya cobraron la vida de dos inmigrantes, de nacionalidades colombiana y venezolana.

Además, se dispusieron 30 servicios sanitarios móviles y, «desde el punto de vista de despliegue de las Fuerzas Armadas y de Orden, hemos aumentado nuestra dotación en la comuna para respaldar el control fronterizo, como también los aspectos administrativos que se deben desarrollar y para brindar una mayor seguridad y prevención dentro de la comuna», dijo el gobernador, Natan Olivos.

«Contexto»

El ministro del Interior explicó, asimismo, que «hay que poner un poco de contexto: la entrada irregular en la zona de Colchane está relacionada con una crisis que va más allá de lo que pudiésemos explicar desde Chile».

«Es una crisis internacional, sanitaria, social, un gran porcentaje son de nacionalidad venezolana y tiene que ver con flujos migratorios que comenzaron hace años. Esos flujos no son nuevos en Chile, lo que pasa es que han ido mutando en virtud de los tiempos». Según Delgado, «el primer semestre de 2019, antes de que se pusiera la visa consular, 128.000 personas que se quedaron en Chile. Eso cambió en el segundo semestre a menos de 2.000».

«La entrada irregular está relacionada con una crisis que va más allá de lo que pudiésemos explicar desde Chile».

Rodrigo Delgado, Ministro del Interior

«Expectantes» ante nueva ley

El Servicio Jesuita a Migrantes (SJM) señaló ayer que la próxima promulgación de la nueva ley de migración «genera expectativa» entre quienes arriban al país, ya que puede «ayudarles a mejorar su situación a través de los nuevos tipos de visas, convalidaciones de estudios y el acceso a derechos, cuestiones que les permitirían integrarse de mejor manera a la sociedad chilena. (…) Sin embargo, la normativa no se está haciendo cargo del alto porcentaje de personas migrantes que van quedando en situación irregular».

Fuente: El Mercurio de Antofagasta

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